Todavía la institución que parió
la Fundación AIB, que es el Aeropuerto Internacional de Bávaro, no ha podido volar ni un solo avión, porque intereses mancornados y enquistados
en la complicidad se lo han
impedido.
Ha sido una forma egoísta y de
poca visión, pero lo que no
saben, esos que ponen retrancas
a este proyecto de visión, es que
se están tirando prácticamente a todo el país en su contra.
Quién no quiere progreso ?
Aunque no hemos podido volar
aún el primer avión, la familia Hazoury si ha tocado
cielo con las inmensas
cantidad de obras sociales que está realizando en toda la Región
Este del país.
Estos trabajos se han intensificados post- huracán
Fiona, ya que muchas personas
se vieron afectadas por esta
tormenta. Gracias, a esta fundación de servicios y amor(AIB),miles de personas han recibido la mano piadosa
y solidaria de esta institución sin fines de lucros.
La familia Hazoury ha demostrado
que su interés social está por encima de todo, esta gente no tiene barrera para servir. Ojalá que este país tenga mucha gente como ellos.
En la historia de la provincia de la Altagracia, ninguna institución ha servido tanto en tan poco tiempo.
Esta fundación ( AIB), que nace con la encomienda de dar servicios con amor, desde ya ha sido recibida y aplaudida por la sociedad.
Lo que esperamos pronto, es que
los cielos se vistan de aviones del
Aeropuerto Internacional de Bávaro, para que por fin se despeguen las oportunidades de empleos y crecimiento económico
en la provincia.
Reflexion del Dr Herman Pilier Báez
Médico - gerente,
escritor, poeta,
periodista, investigador,
columnista, gremialista,
comunitario.
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